¡Increíble riad! Azulejos y estuco hermosos, detalles cuidados en todos lados. Muebles pintados a mano, decoración bereber. Habitaciones espaciosas, limpias y únicas. Desayuno tradicional delicioso. Atención al cliente excepcional, te reciben con té de menta y pastas de almendra. Maravillosa estancia, volvería sin dudarlo. ¡Gracias por todo!

El trato de los hermanos que regentan el riad fue excepcional. Desde el check-in, donde nos recibieron con té de menta y pastelillos, hasta el check-out, fueron muy atentos y serviciales en todo momento. El riad en sí es precioso, con una decoración marroquí impresionante. Las habitaciones son amplias y limpias, cada una con su propio estilo único. El desayuno, servido en el patio central, fue delicioso y abundante. Sin duda, recomendaría este riad y volvería sin pensármelo dos veces.

Ninguna queja.

Nuestra estancia en el riad fue una maravilla. El lugar está magníficamente decorado con azulejos y estuco, con un gran atención al detalle. Las habitaciones eran espaciosas y limpias, cada una con su propio estilo único. El desayuno tradicional y abundante se sirve en un hermoso patio central. Pero lo que realmente hizo destacar nuestra experiencia fue la atención al cliente excepcional. Desde el té de menta de bienvenida hasta el constante cuidado y apoyo que recibimos cuando llegamos enfermos, el personal fue atento, servicial y cariñoso. ¡Totalmente recomendable!

Me gustó todo 😊

Lo mejor de todo fue el lujo de las instalaciones, la ubicación perfecta y el increíble servicio del personal. Desde el cálido check-in con té de menta y pastelillos, hasta la atención de los gemelos dueños, quienes nos ayudaron en todo momento. Nos organizaron todas las actividades y la cena fue simplemente espectacular. La decoración marroquí, la vista panorámica desde la terraza, la comida fresca y bien preparada, el expeditivo check-out, todo fue de 10. Nos hicieron sentir como en casa y sin duda harán que nuestra estancia sea inolvidable. Esperamos volver pronto.

Estaba al lado de la Madrasa de Bou Inania y el Al-Attarine Madrasa también estaba no muy lejos este lugar. El edificio del hotel es precioso. Realmente me ha gustado nuestra estancia, seguro que vuelvo.

El personal era muy agradable y excepcional, un servicio excepcional. La cama era super cómoda, el baño bueno y había un minibar, una caja fuerte y una zona de estar en la habitación. El desayuno era increíble y buenísimo, tenía una buena cantidad de opciones.

el Riad Le Grand Alcazar superó todas nuestras expectativas. Los hermanos que lo regentan fueron extremadamente amables y atentos durante nuestra estancia en Fez. La ubicación es perfecta, en una zona tranquila pero cerca de todo. La habitación era amplia y cómoda, y disfrutamos mucho de la terraza. La comida casera que nos sirvieron fue deliciosa. Sin duda, volveremos.

Faltó fruta en el desayuno.

Mi estancia en este Riad fue altamente satisfactoria. Las instalaciones de ultra lujo y su ubicación perfecta hicieron que mi estancia en Le Grand Alcazar fuera inolvidable. Pero lo que más destaco es la atención del personal, especialmente Omar y Othman, quienes fueron geniales. Estoy muy agradecido por todo, y espero tener la oportunidad de volver a alojarme aquí en el futuro. La cena fue excelente y el servicio de atención al cliente fue impecable.

Recomendaría este lugar sin dudarlo.

El riad es simplemente maravilloso. La decoración con azulejos y estuco es impresionante, y se nota la atención al detalle en cada rincón. Las habitaciones son espaciosas, limpias y hermosamente amuebladas. El desayuno tradicional y abundante se sirve en el encantador patio central. El personal es excepcionalmente atento y servicial, siempre dispuesto a ayudar. Recomiendo totalmente este riad, volvería sin dudarlo.

Si tuviera que mencionar algo, diría que el desayuno podría ser un poco más variado.

Me encantó la decoración del hotel, llena de detalles tradicionales marroquíes que le dieron un ambiente encantador. Las áreas comunes eran muy acogedoras y perfectas para relajarse. Además, me alegró ver que el hotel era muy accesible para personas mayores como yo.

Me habría gustado tener opciones de desayuno más adecuadas para personas mayores. Un desayuno con tortilla, embutidos, huevos o queso habría sido ideal.

El hotel es una maravilla, lleno de detalles hermosos como azulejos pintados a mano y estuco. Las habitaciones son espaciosas, limpias y están amuebladas de forma única. El desayuno es tradicional y abundante. El personal es exquisito y nos trataron con atención y cariño desde el momento en que llegamos. La ubicación es perfecta, cerca de los principales lugares de interés y también de las hermosas colinas de los alrededores.

Nada que decir.

Estaba muy emocionado de visitar le monumento que había elegido y elegí este hotel solo por esa razón. Sin embargo, me sorprendió gratamente que el personal de recepción hablara árabe, inglés, español y francés. Además, me encantó la comodidad y la atención del restaurante, la recepción las 24 horas y el servicio de habitaciones, junto con el WiFi gratuito en todo el establecimiento.

Quizás podría mejorar que el desayuno tuviera más opciones de proteína y fruta fresca, y también sugeriría que se agreguen carritos para mover las maletas desde el hotel al auto.

Este lugar tiene un diseño tradicional lujoso con hermosas vistas al patio interior, el personal es increíblemente amable, y los servicios son perfectos, incluyendo una amplia variedad de comida deliciosa.

Este lugar combina la tradición con habitaciones modernas, ofreciendo un generoso desayuno con crepes frescos y un excelente servicio.

Esta ubicación es conveniente ya que tiene estacionamiento cerca. Las habitaciones cuentan con camas cómodas, aire acondicionado y una cocina también.